martes, 20 de abril de 2010

Próxima Tertulia: presentación de "La Tercera Piel"


La tercera tertulia del Club Lisboa tendrá como invitado a Ramón Fernández Durán, ingeniero, urbanista, escritor, pensador, activista, miembro de Ecologistas en Acción y referente del pensamiento y la acción altermundialista. En esta ocasión visitará el Club Lisboa para hablarnos de su última obra: "La Tercera Piel".

"La Tercera Piel" es una nueva entrega de Ramón Fernández Durán, dentro del libro que el autor está escribiendo sobre la crisis mundial y el previsible colapso civilizatorio. Este trabajo es una pieza más del análisis del siglo XX, al que se dedica una especial atención, debido a la importancia de la dimensión de la infoesfera en el actual capitalismo global. Allí en donde muchas ocasiones no llega el agua, llega la televisión. El siglo XX va a ser testigo de un cambio espectacular: la conquista de las sociedades humanas por la imagen, y la creciente supeditación a ésta del texto escrito y el sonido (voz y música), creando una verdadera realidad virtual. Esta transformación se produce en el marco de la expansión del capitalismo a escala global, posibilitada y enormemente reforzada por la creación de la llamada Tercera Piel o infoesfera (radio, televisión, Internet...). El desarrollo de la Tercera Piel favorece el desplazamiento de las preocupaciones humanas hacia el espacio de lo virtual, ocultando el deterioro del espacio construido, la Segunda Piel, y por supuesto de la degradación de la Primera Piel, o Madre Naturaleza.

En el próximo Club Lisboa intervendrán también Miguel Romero, Igor Sádaba e Isidro Jiménez.

El Club Lisboa es una iniciativa de Periodistas en Acción, un grupo de periodistas y comunicadores de Ecologistas en Acción. Nace de la necesidad de reflexionar acerca de qué tipo de periodismo queremos hacer. La libre opinión y el debate son los elementos fundamentales de este proyecto, cuyo objetivo último es contribuir a inventar nuevas formas de hacer comunicación.

La tertulia tendrá lugar el miércoles 28 de abril a las 19'30 horas en el local de Ecologistas en Acción (C/Marqués de Leganés Nº 12. Metro: Plaza de España, Callao o Santo Domingo).

Para más información, Carlos Corominas: 660 748 803 o elclublisboa@gmail.com


viernes, 26 de marzo de 2010

José Manuel Martín Medem: “La mayor parte de la información no se puede utilizar o no es potable”




El pasado 3 de Marzo José Manuel Martín Medem participó en la segunda tertulia del Club Lisboa para explicar la situación de los medios de comunicación en España y Latinoamérica. Defendió una visión profundamente crítica acerca de los intereses ocultos de los medios de comunicación y la connivencia de los poderes públicos hacia los grupos privados.

Su diagnóstico sobre el panorama español fue poco alentador por varias razones. En primer lugar, porque de acuerdo con la Constitución de 1978, poseemos un modelo de comunicación conformado como un triángulo en cuyos vértices encontraríamos la comunicación como negocio, como servicio público y como servicio comunitario, el cual daría ocasión a la intervención de las iniciativas sociales, creando así un equilibrio entre los tres actores. Sin embargo, esta estructura establecida legalmente no se asemeja a la realidad, pues lo que sucede es que a lo largo de los últimos 25 años, el servicio público se ha reducido gradualmente, teniendo que rivalizar con la iniciativa privada, quien ha gozado de mayor impunidad y continúa expandiéndose, produciendo a su vez el bloqueo prácticamente absoluto del sector comunitario social.

Con la nueva Ley Audiovisual que se está debatiendo actualmente en el Parlamento esta situación se agrava, además de demostrar la pésima gestión legislativa que se ha ido haciendo desde la creación de la Constitución. Puesto que lo que va a producir dicha ley es la consolidación de las desigualdades que paulatinamente han surgido, beneficiando al sector comercial y en detrimento de lo público y lo comunitario. Como consecuencia, se impone la concesión de las licencias a través de los gobiernos de las comunidades autónomas, lo que supone la adjudicación de licencias a aquellos que compartan las mismas ideas políticas que quienes se encuentran en el poder económico de la correspondiente autonomía.

En segundo lugar, según la Constitución española, se reconoce el derecho de acceso a los grupos políticos y sociales significativos, cuyo acceso se regulará por ley. La realidad es que desde entonces hasta el presente, en los sucesivos gobiernos este derecho se paralizó ya que se decidió no aplicarlo. Dicha decisión fue ignorada por la sociedad española, quien desconocía la importancia de reivindicar el derecho de acceso, ya que desde ningún colectivo social ni político se ha formulado un planteamiento serio que lo defienda. Pero en 2009, con la creación de la ley de financiación de radio y televisión pública se instauró que el servicio público, aparte de eliminar la publicidad, tendría 12 horas semanales dedicadas a espacios para las organizaciones políticas y sociales, bajo la gestión del Consejo de Administración de Radio Televisión Española. Sin embargo, curiosamente, este derecho permanece bloqueado, a pesar de que dentro de dicho Consejo participan por primera vez representantes de los sindicatos y de partidos políticos. Luego es incomprensible que a quienes les interesa disfrutar de esos espacios mediáticos otorgados por ley no intenten desbloquear este derecho.

En cuanto al panorama de los medios en Latinoamérica, Martín Medem comentó que habían heredado el modelo norteamericano, en el que hay uno o dos medios de comunicación predominantes, los cuales pasan de ser simples medios a convertirse prácticamente en grupos de oposición, como otro partido más en contra del gobierno. Por el contrario, en Argentina, donde el grupo Clarín es el más importante e influyente, se puso en marcha una ley que pretende limitar la actividad de los grandes grupos de comunicación a lo que Clarín ha reaccionado agresivamente con el pretexto de que se está atentando contra su libertad de empresa, como si se tratara de libertad de expresión, además de las sucesivas críticas por una actitud antiestadounidense o la inseguridad política procedente del ánimo de recuperar la gestión propia de los recursos naturales sin la intervención extranjera.

A esta voluntad de cambio se suman más países como Venezuela, Bolivia y Ecuador. No obstante, y paradójicamente, se está dando el proceso inverso en Europa, empezando por España e Italia, donde se está produciendo un deterioro de la radio y televisión pública, convirtiendo la comunicación en un producto absolutamente comercial. Mientras que en América Latina se observa un intento por construir un servicio público, dando espacio a iniciativas que puedan competir con el sector privado bajo las directrices de una legislación que equipare los tres actores (el público, el privado y el comunitario).

Para José Manuel Martín Medem, “con la información sucede lo mismo que con el agua: la mayor parte de la información no se puede utilizar o no es potable, porque si se utiliza se puede convertir en un envenenamiento”. La conclusión es que es necesario un cambio de mirada y procesos de formación para que la ciudadanía pueda juzgar críticamente a los medios de comunicación.

martes, 23 de febrero de 2010

Próxima tertulia de El Club Lisboa

El Club Lisboa nace de la necesidad de reflexionar acerca de qué tipo de periodismo queremos hacer. La libre opinión y el debate son los elementos fundamentales de este nuevo proyecto, cuyo objetivo último es contribuir a inventar nuevas formas de hacer comunicación. El Club Lisboa se establece como un espacio en el que reivindicar los valores del periodismo que se perdieron entre la confusión y el espectáculo: el beneficio de la comunidad, la búsqueda de la verdad, el fomento de una opinión pública bien informada. En última instancia, el Club Lisboa ofrece la posibilidad a aquellos que todavía creen en el periodismo de calidad de no sentirse solos.

La segunda tertulia del Club Lisboa tendrá como invitado a José Manuel Martín Medem, periodista y escritor. El encuentro versará sobre el estado de la televisión pública, así como de la situación política y de los medios de comunicación en América Latina.

La tertulia tendrá lugar el próximo miércoles 3 de Marzo a las 20 horas en el local de Ecologistas en Acción (C/Marqués de Leganés Nº 12. Metro: Plaza de España, Callao o Santo Domingo).

El Club Lisboa es una iniciativa de Periodistas en Acción, un grupo de periodistas comprometidos con la realidad que nos rodea y que se integra en la confederación de Ecologistas en Acción.

El derecho de acceso: un herramienta para la ciudadanía

El acceso de los ciudadanos a los medios de comunicación de titularidad pública se contempla como una forma de afianzar la democracia. La posibilidad de los grupos sociales representativos de dirigirse directamente a la ciudadanía se concibe como una muestra de libertad y pluralismo. Sin embargo, el derecho de acceso a los medios de comunicación pública dista de ser efectivo por todas las limitaciones que se le imponen.

La constitución española en su artículo 20 establece que “la ley regulará el acceso de los grupos sociales y políticos significativos a los medios de comunicación social dependientes del Estado”. No ha sido hasta 2006 que se ha regulado el derecho de acceso a través de la Ley de Radio y Televisión de Titularidad Estatal, que permite la creación de espacios propios para la expresión directa de los grupos sociales y políticos significativos.

No obstante, el derecho de acceso ha quedado seriamente cercenado por las directrices regulatorias del Consejo de Administración de RTVE. El apartado 5 de estas directrices se refiere a los límites del citado derecho y señala: “la Corporación RTVE conocerá con carácter previo a su difusión los contenidos propuestos por los grupos, reservándose el derecho a no difundir aquellos que sean contrarios a los valores y principios constitucionales o que vulneren derechos fundamentales de terceros”. Algunos autores consideran que esta limitación establece la censura previa en la RTVE.

El derecho de acceso puede y debe ser una herramienta más de las organizaciones sociales para transmitir su discurso a la ciudadanía. Una buena comunicación entre los actores sociales y los ciudadanos fomentará la existencia de una opinión pública bien formada. Una opinión pública capaz de actuar por sí misma ante los problemas de la actualidad.

Para más información, pinchad el artículo de José Manuel Martín Medem sobre el derecho de acceso: http://www.nodo50.org/codoacodo/oct07/josemanuel.htm

domingo, 17 de enero de 2010

Declaración de intenciones

Querido periodista:

Recuerdas hace cuatro años, cuando paseábamos por las calles de Madrid, andando el callejero a través de las gentes de la capital. Hablábamos de cosas triviales, de cosas profundas y de periodismo, sobretodo hablábamos, porque amábamos, de periodismo. En esas largas caminatas todo lo imaginable podía ocurrir por el mero hecho de haberlo soñado.

No nos costaba analizar los problemas que sufría el periodismo y que, tras cuatro años, son si cabe más agudos. Comprendíamos como la empresa informativa se había adueñado de la calidad periodística para ningunearla. Comentábamos, decepcionados, los últimos casos de mal periodismo, de periodismo de espectáculo, de falta de rigor y de manipulación descarada. Nos alarmábamos ante un periodismo que había olvidado su función pública para que cuadraran los balances, que descartaba la profesionalidad a favor de la rapidez, de los bajos salarios, del beneficio. Nos indignábamos al escuchar las soflamas de nuevos y antiguos fanáticos, sirviéndose de las tribunas mediáticas para incitar al odio, al miedo, al rencor. Sin embargo, creíamos que debía haber otro camino; otro modo de hacer las cosas.

Éramos estudiantes primerizos de un periodismo que aún no conocíamos, que aún no nos había decepcionado. Es por eso que asumimos como nuestra la obligación de defender ese otro camino. Un día, en uno de los paseos, me hablaste de El Fantástico Club de Portugal, un relato de Manuel Rivas incluido en el libro El Periodismo es un cuento. Trataba acerca de un país cercano pero desconocido. Un país hermoso a pesar de haber sido relegado a un segundo plano de la historia, un país que invita a la saudade: lo que Rivas describe como la nostalgia del futuro. Nosotros comprendimos enseguida esa nostalgia: expresaba claramente nuestro sentimiento hacia el periodismo. Un periodismo que fuera lo que debía ser, como un país cercano pero desconocido. Un lugar ignoto hacia el que debíamos caminar, que teníamos que conocer y explorar. Un periodismo comprometido con su realidad, con una marcada función social y sin las limitaciones de los beneficios. Así surgió el Club Lisboa: como un lugar donde soñar periodismo sin temor a intereses económicos ni partidarios. El Club Lisboa: un lugar donde reconocer en el periodismo nuestra patria y sentirnos orgullosos de llamarnos periodistas. Éramos conscientes de que el periodismo que queremos es una utopía y ante eso planteábamos dos preguntas. ¿Por qué no crear un lugar donde la utopía sea una forma de hacer? ¿Por qué no ser nosotros la utopía?

Hoy, amigo periodista, te escribo desde Lisboa, allí donde el océano se muestra inmenso en sus posibilidades. Te escribo en el momento en el que nos embarcamos en busca de aquel lugar donde reconocernos como lo que queremos ser, lo que nunca debimos dejar de ser.

El Club Lisboa, a 17 de Enero de 2010.